viernes, 27 de abril de 2018

Ahora estás en el cielo

Te fuiste al cielo
-abuelita querida-
un 26 de abril
muy tempranito.

Lo primero que vino a mi mente
fue decirle al Chapis
que te recibiera
los imaginé saludándose con gusto
-como cuando se veían en las comidas familiares-
quizás fumarían juntos
se pondrían al día
y el Chapis te contaría a detalle
quién es quién en el cielo
y de aquellos lugares que no puedes dejar de visitar.

Siempre fuiste una dama
el pudor
la inocencia
la ingenuidad -a veces propiciada-
eran tus cartas.

Como las que tanto te gustaba jugar
-con tu hermana, con tus vecinas, con tu familia-
tu baraja
tus novelas
tu sudoku
tu póker digital.

No te gustaba hacer mucho
tus casas eran la máxima limpieza
y habiendo trabajado desde niña
te entendía perfectamente
aunque a veces nos burlábamos de ti
-por tus batas, por tus tubos-
por no querer cocinar algo muy elaborado
pese a que eres la más grande chef/cocinera que yo conozca

El sábado pasado
-Guadis adorada-
se me rompió el corazón
al verte por la cámara del teléfono
vi tu dolor
vi que ya no estabas
y luego convulsiones
y sonrisas de mi tía
sin saber qué decir ni qué hacer.

Me pone muy mal
sentir que te fuiste sufriendo.

Tengo tu voz
grabada entre mis orejas
cantando un bolero
gritando ¡Ggreeeessssssss!
Tengo tus ojos puros
mirándome en confidencia

Tengo el dolor
particular
de haberme despedido muchas veces
-todas las veces que te vi, que pude verte-
te pedí tu bendición
y te dije lo mucho que te amaba.

Tengo tu foto
y me sigo despidiendo de ti todas las mañanas
y sigo pidiendo tu bendición.

Hoy
tomándome mi café por la mañana
volví a imaginarte
fumando con el Chapis en el cielo.


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Te pienso abue, y canto ese bolero que vive en mí. Ese que resume el amor que mi abuelo Eduardo, te tuvo y te tiene. Esa música de mi infancia, que cobra sentido gracias a ti:

Aunque tú no me quieras

Yo muchas veces te juré
que había olvidado
todos los besos
que por bien o mal te di,

juré muchas veces
que jamás lloraría
que jamás yo te habría de rogar.

Pero es mentira
ya lo ves, hoy te he buscado
para decirte
que no puedo estar sin ti,
me importa quererte
aunque tú no me quieras
si vivo sólo para ti.

jueves, 5 de abril de 2018

Estar en familia




En esta Semana Santa
estuve con mi familia
conocí a Sofi
-la cargué, la arrullé, la miré, la besé-
ayudé a celebrar el primer cumpleaños de Isabella
-jugué con ella, la alimenté, la cuidé, la bañé-
mi corazón, mi ser
se llenó de amor y bendiciones
de energía de la buena

Pero
-me duele escribirlo-
creo que se me había olvidado
lo que significa
lo que requiere
'ser' parte de una familia

¿Cómo cambia nuestro 'Ser' al estar en familia?
¿Qué significa 'Estar' en familia?
Yo no lo sé
miro
reflexiono
siento

Soy parte de una familia
pero realmente no estoy
-físicamente-
emocionalmente vivo ahí
-siempre lo haré-
Igual
creo que hay quienes son familia
y viven 'ahí' y tampoco 'son'
tampoco 'están'
que es peor (pienso)

Creo que sigo teniendo un roll
juego un papel en mi familia
por ende
mi 'ser' en familia
existe
hace sentido
tiene vigencia

Soy el que mira las fotos
y pocas veces está en ellas
soy esa cara que muestra el teléfono
presente en todos los eventos
sin 'estar' ahí
soy el confidente
soy el hijo y el hermano
-alguna vez fui al 'abogado' de mi abuelo-
y sigo siendo el 'cuaderno de raya chica' de Marisa

El problema viene siendo 'estar'
nada me gustaría más
que volver a estar con ellos
vivir con ellos
vivir físicamente cercano a ellos
ser parte de ese hermoso torbellino
partícipe contínuo del desvelo y el caos
de los chismes
y del amor...

sentir ese abrazo cuando lo necesito
que cuando los niños crezcan
me reconozcan y sepan quién soy o lo que fui

Cuando uno visita su País
tiene que ser un malabarista
y buscar un equilibrio
entre reconectar con su cultura
-tus amigos, tu comida, tu música, tu acento, la realidad de tu País, tu sociedad...-
mientras te enchufas de nuevo en tu papel de miembro de familia
lo que representas para tus padres
lo que representas para tus hermanos
lo que puedes, no puedes y debes hacer

Cualquier familia
como institución que es
se basa mucho en juego de poderes
alguno tiene más voz
alguno negocia mejor
-hay rencillas, estrategias, moretones y patadas-
hay quienes se mantienen al costado
hay quienes desertan y no vuelven
desaparecen

Hay quienes nos fuimos y nos negamos a esfumarnos
y seguimos intentando ser parte de esa vorágine
por que añoramos ese abrazo
ese estar en 'bola'
ser parte de esa 'bola'
y reírte y llorar
juntos y con ellos